VOLVER A EMPEZAR

VOLVER A EMPEZAR

«¿Cómo aprendiste a patinar?» --preguntó alguien al ganador de una competencia. «Levantándome cada vez que me caía» --fue la respuesta.
La vida cristiana es también una serie de nuevos comienzos, de caerse y levantarse de nuevo. Cuando tropezamos a menudo pensamos: «He vuelto a fracasar. Tal vez deba desistir.» Pero Dios es el Dios de los nuevos comienzos. No sólo perdona nuestros pecados, sino que también usa nuestros fracasos para hacernos más sabios.
A veces nuestro orgullo puede hacernos resistir el volver a empezar. En el Salmo 25 David demostró tener un corazón humilde al orar por perdón. Pidió al Señor que perdonara los pecados de su juventud (v.7), y se regocijó porque Dios enseña a los pecadores (v.8), guía e instruye al humilde (v.9), y enseña sus caminos a aquellos que le temen
John Newton, el compositor del himno «Sublime gracia», expresó una perspectiva similar: «Aunque no soy lo que debiera ser, ni lo que me gustaría ser, ni tampoco lo que espero ser, puedo decir honestamente que tampoco soy lo que era una vez. . . . ¡Por la gracia de Dios soy lo que soy!
¿Te sientes ser un fracaso? ¿Necesitas un nuevo comienzo? Acude al Señor en humildad y Él te mostrará que es el Dios de los nuevos comienzos.